Medio siglo atrás, cuando Marx escribió “El Capital”, la libre concurrencia era considerada por la mayor parte de los economistas como una “ley natural”. La ciencia oficial intentó aniquilar por la conspiración del silencio la obra de Marx, el cual había demostrado, por medio del análisis teórico e histórico del capitalismo, que la libre concurrencia engendra la concentración de la producción, y que dicha concentración, en un grado de su desarrollo, conduce al monopolio. Ahora el monopolio es un hecho.
V.I. LENIN (El imperialismo, fase superior del capitalismo)
V.I. LENIN (El imperialismo, fase superior del capitalismo)
El Perú tiene varios tratados firmados con Europa, China y EEUU. Siendo estos tratados o mejor dicho con-tratados de libre mercado que estos países pueden realizar en nuestro país desenvolviendo capitales de empresas extranjeras (trasnacionales) y de esta manera ir destruyendo nuestra incipiente o endeble producción nacional, colocando nuestros recursos naturales y demás para la explotación de grandes capitales, quienes se ubican estratégicamente en las distintas ramas de nuestro país: minería, metalúrgica, construcción, tecnología, alimentación, supermercados, entre otros.
Como sus siglas lo dice es un Acuerdo Trans-Pacifico de Asociación Económica que involucra a 12 países: EE.UU., Japón, Australia, Nueva Zelanda, Malasia, Brunei, Singapur, Vietnam, Canadá, y los latinoamericanos México, Perú y Chile.
Dentro de sus capítulos busca reglamentar temáticas que van desde el comercio de lácteos, hasta la regulación laboral, pasando por derechos de autor, patentes de medicamentos, inversiones estatales y de medio ambiente. Todo esto se sabe porque salió a luz a través de Wikileaks en noviembre de 2013. Es decir, el Estado peruano con su clase política parasitaria lo iba negociando a espaldas del pueblo.
Siendo perjudicial para las clases populares en distintas áreas, por ejemplo, como en salud con la desaparición de los medicamentos genéricos, medicamentos que son de mayor alcance por el costo accesible a los bolsillos del pueblo. En su lugar, se colocarán a la venta tan solo medicamentos de empresas que tienen la patente oficial, que como es lógico tienen un costo mayor y son de difícil acceso al trabajador en medio de una constante alza del costo de vida. En consecuencia, la salud será un privilegio y el pobre está condenado a no curarse. Cabe resaltar que los medicamentos de marca y genéricos, tiene los mismos resultados en el tratamiento de la enfermedad.
Así sucederá también en el agro, ya que las semillas serán patentadas por empresas que controlan grandes capitales, de esta manera se prohibirá la producción por otros pequeños agricultores ya que, no serán considerados “dueños de sus semillas”. Tan solo podrán hacerlo con el permiso de esta empresa y con una limitada producción. Es decir nos quitarán el derecho de producir nuestros propios productos (papa, maíz, camote, otros) que son oriundos de nuestro territorio.
Recordemos lo planteado por V.I. Lenin: “en el umbral del siglo XX asistimos a la formación de monopolios de otro género: primero, uniones monopolistas de capitalistas en todos los países de capitalismo desarrollado; segundo, situación monopolista de unos pocos países ricos, en los cuales la acumulación de capital había alcanzado proporciones gigantescas. Surgió un enorme “exceso de capital” en los países avanzados”.
“Mientras el capitalismo es capitalismo, el exceso de capital no se consagra a la elevación del nivel de vida de las masas en un país determinado, ya que esto significaría la disminución de las ganancias de los capitalistas, sino al acrecentamiento de estos beneficios mediante la exportación de capital al extranjero, a los países atrasados”.
Así sucederá también en el agro, ya que las semillas serán patentadas por empresas que controlan grandes capitales, de esta manera se prohibirá la producción por otros pequeños agricultores ya que, no serán considerados “dueños de sus semillas”. Tan solo podrán hacerlo con el permiso de esta empresa y con una limitada producción. Es decir nos quitarán el derecho de producir nuestros propios productos (papa, maíz, camote, otros) que son oriundos de nuestro territorio.
Recordemos lo planteado por V.I. Lenin: “en el umbral del siglo XX asistimos a la formación de monopolios de otro género: primero, uniones monopolistas de capitalistas en todos los países de capitalismo desarrollado; segundo, situación monopolista de unos pocos países ricos, en los cuales la acumulación de capital había alcanzado proporciones gigantescas. Surgió un enorme “exceso de capital” en los países avanzados”.
“Mientras el capitalismo es capitalismo, el exceso de capital no se consagra a la elevación del nivel de vida de las masas en un país determinado, ya que esto significaría la disminución de las ganancias de los capitalistas, sino al acrecentamiento de estos beneficios mediante la exportación de capital al extranjero, a los países atrasados”.
EL RECHAZO AL TPP, TRATADO IMPERIALISTA
Esta lucha en rechazo al tratado se desenvuelve en un contexto electoral donde priman promesas e ilusiones constitucionales. Por otro lado el pueblo en su trajín diario continúa trabajando y luchando contra la explotación capitalista.
Habiéndose organizado movilizaciones como medidas de lucha para impedir la aprobación del Tratado, aunque hasta el momento carece de eco masificado en los distintos espacios gremiales de trabajadores, obreros o los espacios gremiales de defensa del agro. Que no consideran las consecuencias nefastas de ratificar y aprobar el TPP. Mientras que las denuncias de rechazo y movilización contra el TPP la tomaron como iniciativa las ONG al servicio de ciertas farmacéuticas, lo cual no está mal, pero aún carece de los demás espacios populares y gremiales que se aúnan a la lucha, contribuyendo de esta manera a que se asuma un carácter político de rechazo de las masas populares.
Tenemos presente que para este proceso de ocultamiento y desconocimiento del pueblo, cumplieron su papel el Estado y el Imperialismo que se coludieron acordando mantener las negociaciones en secreto.
Por lo tanto, una de las tareas debe de ser las campañas de propagandización y agitación sobre el TPP, sus implicancias y consecuencias ya que este tratado no beneficia al pueblo y aprobarlo y ratificarlo implicarían condenar a no tener salud y atentar la vida del pueblo.
Es necesario que la lucha contra el TPP no sea solo mediática y que no se piense que se debe de subordinar a lograr espacios en los medios de comunicación con la idea de que “informen nuestro rechazo al TPP”, lo cual sería no servir a RECHAZAR EL TPP en los hechos. Pero, sí se debe consolidar el desconocimiento, entendiendo que la lucha no la subordinamos a ninguna ONG. Es por eso que debemos apuntar la propaganda y agitación al sector del pueblo más golpeado como en los conos de Lima, a la vez que se impulsa los espacios de organizaciones gremiales o juveniles.
Tenemos presente que para este proceso de ocultamiento y desconocimiento del pueblo, cumplieron su papel el Estado y el Imperialismo que se coludieron acordando mantener las negociaciones en secreto.
Por lo tanto, una de las tareas debe de ser las campañas de propagandización y agitación sobre el TPP, sus implicancias y consecuencias ya que este tratado no beneficia al pueblo y aprobarlo y ratificarlo implicarían condenar a no tener salud y atentar la vida del pueblo.
Es necesario que la lucha contra el TPP no sea solo mediática y que no se piense que se debe de subordinar a lograr espacios en los medios de comunicación con la idea de que “informen nuestro rechazo al TPP”, lo cual sería no servir a RECHAZAR EL TPP en los hechos. Pero, sí se debe consolidar el desconocimiento, entendiendo que la lucha no la subordinamos a ninguna ONG. Es por eso que debemos apuntar la propaganda y agitación al sector del pueblo más golpeado como en los conos de Lima, a la vez que se impulsa los espacios de organizaciones gremiales o juveniles.
CARLOS MERATY
Es importante agregar que los gobiernos de turno obedecen al mismo amo: el imperialismo.
ResponderEliminarEl gobierno de Alan García comenzó la negociación el 2008. El gobierno de Ollanta Humala, ratificó los capítulos que ya se habían negociado y continuó la senda anterior también de rodillas. Cedió en la extensión de 5 a 8 años en la exclusividad para la venta de medicamento.
Sobre el mismo tema concedió el mismo trato para las licencias de segundo uso. Esto, en buen castellano, es que si un laboratorio vende unas pastillas elaboradas para quitar el dolor de estómago y descubren (cualquiera puede ser) que tiene una acción benéfica para el tratamiento de la epilepsia, el Estado extiende, al laboratorio, la exclusividad para su producción y comercialización, como si fuera uno diferente, sin cambiarle ni el nombre, a 8 años más.
Solo podemos comprarle a la transnacional, así exista un genérico, fabricado por otro país, que sea más cómodo y tenga la misma eficacia..
Los felicito compañeros por su constancia en denunciar los atropellos que se cometen, por su aliento constante las justas luchas del pueblo y sobre todo por la tarea de compartir conocimiento para forjar conciencia de clase en nosotros.